Spicy Butt
El mercado negro siempre existe, dice mi vecina en la mesa de atrás y le creo. Desde la ventana justo al lado de nuestra mesa veo a un hombre salir del negocio de al frente con dos cervezas y se monta en su carro con ellas. El soundtrack de todo es la música india que sale de la bocina justo arriba de nosotros. Mientras tanto, me arden los labios y el paladar. Mi estómago no se decide entre si se siente raro o normal, pero le aseguro que esta comida es nuestra amiga. El plato que pedí se llama Gang Ped y es un curry rojo robusto con leche de coco, zucchini, zanahorias, pimientos y carne de res que me pone a sudar. Es sabroso, picante y me enseñó que otras áreas también pueden picar. Sé lo que me espera mañana en la mañana luego del café. It’s my spicy butt again.